Como indica su nombre, la Biblioteca Nacional de Francia es la más importante del país. Ni aunque quisieras podrías leerte una mínima parte de todos los libros que contiene. Se estima que el fondo de la biblioteca alberga más de 30 millones de volúmenes. Por si eso fuera poco cuenta con una biblioteca digital de documentos e imágenes llamada “Gallica”.
Es un edificio impresionante que, si tienes oportunidad, te recomendamos que visites su interior. Por ejemplo la sala de los libros impresos.
El llamado "sitio Richelieu", ha sido la sede histórica de la biblioteca desde el año 1720. Este edificio se encuentra en el 2º Distrito, entre las calles des Petits-Champs, Vivienne, Louvois y Richelieu. Su aspecto más llamativo es la sala oval. Esta sala salió de las manos del arquitecto Pascal y fue terminada en 1916. En el “sitio Richelieu” se pueden encontrar sobre todo salas de lectura, tiendas y oficinas. También se puede uno perder en alguna de sus tres salas de exposiciones: la galería Mazarine, la galería de fotografía o galería Mansart y la cripta.
Desde su nacimiento, el patrimonio de la Biblioteca Nacional no ha hecho otra cosa que crecer. Asímismo, su función ha ido variando a lo largo de la historia. Primero fue biblioteca real y después fue servicio del Estado. Finalmente adquirió el carácter de establecimiento público autónomo. Además de las donaciones, sus fondos han aumentado gracias a las compras de ejemplares y a los intercambios con otras bibliotecas. Y sin duda alguna, la época de mayor crecimiento fue la de la Revolución, cuando se incautaron los fondos de establecimientos religiosos, colegios y universidades.
Pero no todas las actividades de la Biblioteca Nacional se desarrollan aquí. Otros edificios en París y en otras ciudades de Francia forman parte del entramado de la Biblioteca Nacional. Desde 1996 muchos de los libros almacenados en el sitio Richelieu fueron albergados en la espectacular biblioteca François Miterrand.
Además del sitio Miterrand y el sitio Richelieu podemos encontrar sedes de la Biblioteca Nacional en París en el sitio de l’Arsenal. En la Ópera Garnier donde encontramos la biblioteca-museo de la Ópera que ofrece al visitante todo tipo de documentos relacionados con la música. Allí se pueden ver partituras, trajes, maquetas y fotografías.
